Cuenta la leyenda, que hace mucho tiempo atrás la luna tenía un amante, su nombre era kwekuatsu, con quien vivía en el mundo espiritual; con quien compartía hermosas noches, paseaban por los cielos juntos. Pero
uno de sus padres estaba celoso, Triksta, quería la luna para si mismo, asi que le pidio a Kwekuatsu bajara a buscarle unas flores a la luna, le dijo que venga a nuestro mundo y que recogiera rosas, y éste, para complacer a su amada lo hizo encantado, pero estando en la tierra se dió cuenta que los espíritus que abandonaban el cielo, nunca puedes regresar. El pobre amante de la luna cayó por inocente, y desde entonces no hace más que ahullar su impotencia,
Y cada noche mira al cielo, y observa en todo su esplendor y aulla su nombre. Pero
no puede volver a tocarla.